martes, 25 de septiembre de 2012

Baquedano a.m.

me levanto por la mañana muerta, no viva, desierta.
me baño, me visto y salgo...asi como ves integra.
camino por las calles vacías y tomo el bus repleto de rostros,
subo al metro también lleno de rostros vacíos, desiertos, no vivos.

Y asi comienza mi vida todas las mañanas, muerta.
y revivo y muero mil veces durante mil días a mil horas distintas.
mas algo abstrae y me explora, me intensifica y me moldea...
una sola esperanza...

unos ojos claros me miran en el vagón, marrones oscuros y luminosos ojos
me estudian, y exhortan, me aman y me olvidan, todo en la misma estación.
y  así llego a baquedano todas las mañanas...muerta.
notando la belleza de mi muerte y mi soberbia en los ojos que me miran...
... finalmente salgo de ahí, vuelvo a nacer.
logro escapar de esa caverna llena de rostros vacios, desiertos y muertos.
logro sentir el aire frio en mi rostro pequeño y en mis pulmones opacos.
aprendo a respirar por primera vez, una vez más...
solo entonces cobro realmente vida, solo en ese delicioso momento, ese único momento de vida y lucidez.

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